Puta papelera (Cap 6)

Me desperté después de toda una noche soñando con Gerard, mire el reloj y ya eran las 9:30, llegaba tarde al ensayo. Mikey, se había ido sin despertarme, pero tampoco me extrañaba, desde que le dije que deberíamos darnos un tiempo había estado un poco molesto.

Salí, de la habitación, y me bebí el poco café que quedaba en el interior de la cafetera, me vestí con lo primero que pille y salí corriendo con mi guitarra prendida a la espalda.

Cuando llegue, empezamos a ensayar, nos dio tiempo a practicar dos canciones. Al terminar, Mikey se acerco donde yo me encontraba

-Frank, mira, llevo tiempo queriendo decirte esto… Frank, me gustas y eres muy importante para mí y me gustaría que cuando te hayas pensado lo nuestro, si quieres podríamos salir juntos, vamos, ser novios y si no pues… ser simplemente amigos

-Gracias Mikey, eres un gran chico

En cuanto dije esto, se me acerco y me estampo un beso dulcemente, después, se aparto si decir nada y se fue. Por el rabillo del ojo, vi como todos se giraban y contemplaban extrañados la escena, todo menos Gerard, él simplemente me miro con una cerca arqueada y mirándome de una forma, preguntándome si ya le había dicho algo a Mikey. Pero, mi única reacción, fue negarle con la cabeza y salir de aquella sala.

Llevaba un rato paseando cuando oí el ruido de una papelera caerse al suelo.

-Mierda – Murmuro una voz que me resulto muy familiar.

Me gire, y ahí estaba, Gerard tendido en el suelo.

-¿Qué hacías siguiéndome=?

-Quería preguntarte si quedábamos, pero como te fuiste corriendo no me dio tiempo

-¿Cómo es que no me has llamado para que te espere?

-Deja de preguntar y levantarme

-Hasta que no me contestes no te ayudo

-Levántame de una puta vez y te contesto

-Vale – Le dije mientras le tendí mi mano

-Bien, te seguía porque quería ver que hacías cuando estabas solo

-¡Gerard!

-¿Qué? No es tan extraño…

-Eso no, mira tu brazo – Le grite asustado

Se miro el brazo, tenía un cristal clavado y varios cortes

-Joder, ¿Qué habían tirado en la basura?

-Bueno, te saco el cristal a la de 3 ¿Vale? 1…2…

Tire del cristal y se lo saque limpiamente

.ayyy! ¿No era hasta 3?

-Ya… pero así, no te lo esperabas

-Vamos a mi casa, que allí tengo vendas y no esta tan lejos de aquí – Me dijo mientras me cogía la mano con su brazo bueno

Salimos de allí, y me llevo a un piso a dos o tres manzanas de donde ensayábamos, subimos a la primera puerta, saco las llaves y abrí la puerta D. Entramos, me condujo hacia el baño y cogió de un pequeño botiquín vendas, algodón y betadine. Lo cogí todo y me dispuse a curarle el brazo, cuando terminamos me llevo al salón

-¿Vamos a ver la tele?

-Te lo iba a proponer, pero se me ocurrido hacer otra cosa – Dijo pícaramente

Después de decir esto, Gerard, me cogió de la mano y me arrastro a su habitación.

-¿Y aquí que quieres hacer?

-Aprender

Gerard se abalanzo sobre mi tirándome a la cama, me beso lentamente recorriendo con su lengua mis labios humedeciéndolos, abrí mi boca para que su lengua pudiese entrar a jugar con la mía, nos separamos para poder respirar unos segundos. Me fije, que Gerard, estaba totalmente excitado al igual que yo.

Le empecé a desabrochar su camisa negra, el me mordía mientras la oreja haciéndome gemir de placer, después le quite el pantalón, dejándole en bóxers mostrando su erección, como yo seguía vestido, decidí quitarme yo solo al ropa

-No, no, no, espera ya te lo quito yo

Me quito la camiseta mientras con su lengua recorría mi vientre desnudo dejándome lleno de babas, pero no me importaba, ya que esas babas eran de él. Después, me quito el pantalón y los calzoncillos dejándome completamente desnudo, empezó a masajearlo lentamente haciéndome estremecerme y agarrar las sabanas.

Frank, pequeño quítame el bóxer me hace daño

Y así lo hice, se los quite, Gerard, me cogió de las caderas sentándome encima de su miembro, con la protección puesta, y sin llegar a penetrarme.

-Frank, si quieres no lo hacemos

-Si, Gee, sui que quiero hacerlo

En verdad, estaba bastante asustado, pero si lo tenía que hacer alguna vez deseaba que fuera con Gerard, por eso ni me lo pensé y acepte.

Gerard se chupo un dedo y me lo introdujo, empezó a moverlo, luego me metió dos y cuando ya había dilatado me metió su gran miembro, empezó a moverlo lentamente, dolía, pero no me quejaba para que no parase, al rato empezó a moverse más bruscamente, yo ya me había acostumbrado, así que gemía, bueno, más que gemidos los dos gritábamos de placer.

-Frank, no aguantare mucho más

-Gee, aguanta un poco más, esto todavía no debería acabar

Gerard hizo caso de mi petición, agarro las sabanas fuertemente y apretó los dientes esperando a que yo ya estuviese listo

-Gee – Gemí – Ya estoy listo

Nos corrimos a la vez, dejando a Gerard el abdomen manchado de semen, Gerard se quito el preservativo, y lo tiro a la basura.

Cuando volvió a la cama, me abrace a él

-La próxima vez en tu casa – Exigió

- Como tú quieras

Todavía abrazados, nos tapamos con las sabanas y nos quedamos dormidos


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Con la colaboracion en el titulo de Ray